Bush hizo la solicitud poco antes de una ceremonia en la que se le entregó al Dalai Lama la Medalla de Oro del Congreso, la máxima condecoración civil de ese país.
"Les he dicho a los chinos que tener libertades religiosos es algo que favorecería a su nación. También les he dicho que creo que favorece sus intereses reunirse con el Dalai Lama", indicó Bush
El mandatario estadounidense se reunió con el Dalai Lama el martes en la Casa Blanca a pesar de las advertencias de China de que el encuentro podría dañar seriamente las relaciones entre ambos países
Molestia y regocijo
Las autoridades chinas están igualmente molestas por la ceremonia de condecoración.
El ministro chino de Relaciones Exteriores, Yang Jieche, reclamó la cancelación de la ceremonia, que según él constituye "una intervención en los asuntos internos chinos".
Durante la entrega d la medalla, el Dalai Lama dijo que el galardón brindaría regocijo y aliento a los tibetanos.
La portavoz de la Casa Blanca, Dana Perino, aclaró que Washington no está tratando de provocar a Pekín.
El Tibet es gobernado por China desde que lo ocupó en 1951.
El Dalai Lama, de 72 años, vive en India desde que se exilió tras un levantamiento en 1959.
Fuentes periodísticas de la BBC en China dicen que la visita del Dalai Lama a EE.UU. tiene lugar en un "momento políticamente sensible", cuando la dirigencia china desarrolla el quinquenal congreso del Partido Comunista.
Derechos Humanos
A su llegada a la capital estadounidense, el Dalai Lama fue recibido por una multitud que cantó y bailó danzas tibetanas.
Recientemente, dirigentes mundiales han sido más explícitos que de costumbre, expresando preocupación por la situación de los derechos humanos en el Tibet.
El pasado mes, el líder tibetano se reunió con la canciller alemana, Ángela Merkel, lo que molestó a Pekín.
El encuentro en Berlín hizo que China se retirara de un simposio que se iba a realizar en Munich y cancelara un evento previsto para Pekín donde se pretendía hablar sobre derechos humanos.
El Dalai Lama también se reunió este año con el primer ministro de Australia, John Howard, y con el canciller de Austria, Alfred Gusenbauer.
Próximamente se reunirá con el primer ministro de Canadá, Stephen Harper.
China manifestó su indignación cuando Canadá concedió la ciudadanía honoraria al Dalai Lama el pasado año.