El primer ministro israelí Ehud Olmert aseguró que las fuerzas armadas de su país continuarán atacando a Hamas en represalia por el disparo de cohetes desde Gaza.
"Nadie que participe de este terrorismo está inmune", dijo Olmert, que habló después de la muerte de un hombre israelí de 36 años de edad tras ser alcanzado por la explosión de un misil palestino en la ciudad de Sderot.
Esta ciudad fronteriza israelí ha sido la más afectada por los más de 200 de cohetes lanzados desde la Franja de Gaza en las últimas dos semanas.
Esta nueva víctima mortal de los enfrentamientos recientes, la segunda del lado israelí, ocurre tras la muerte de cinco palestinos el sábado en Ciudad de Gaza.
Una tregua propuesta por el presidente palestino Mahmoud Abbas fue rechazada por Hamas, que prometió continuar con los ataques mientras Israel prosiga con sus operativos militares.
Más de 40 palestinos han muerto en la Franja en 11 días de bombardeos israelíes, y cerca de 30 políticos vinculados a Hamas han sido arrestados por militares.
Shalit en juego
El sábado, las tropas israelíes detuvieron a Wasfi Kabba, el ministro palestino encargado de la supervisión de los asentamientos israelíes.
Fue el segundo miembro del gabinete palestino arrestado en los últimos tres días.
El brazo armado del partido político islamista Hamas, que gobierna los territorios palestinos, vinculó la suerte del soldado israelí capturado hace un año, Gilad Shalit, a los operativos militares de Israel en Gaza.
Un vocero de Hamas, Abú Obeida, dijo que cualquier ataque de Israel contra los líderes militares o políticos del grupo, volvería más incierta la liberación del soldado.
La última vez que se supo de Shalit fue en junio de 2006.
En una entrevista radial, el ministro de defensa israelí Amir Peretz afirmó esta semana que los palestinos deben comprender que Hamas los conduce "al desastre".
La escalada de violencia en Franja de Gaza, empobrecida y densamente poblada, amenaza con certificar la muerte del agonizante proceso de paz en Medio Oriente.