Una torre de 54 metros, enclavada en la mitad del manto verde amazónico, permite poner a prueba una premisa científica: que esta selva es reponsable del régimen de lluvias en todo el mundo.
Esta estructura es parte de una ambiciosa iniciativa, liderada por Brasil, llamada Proyecto Biósfera-Atmósfera de Gran Escala.
Hacia el "techo de la selva" trepó Valeria Perasso, de BBC Mundo, para saber más sobre la relación entre los árboles amazónicos, y el clima del planeta.