Deborah Kerr estuvo nominada al Oscar a la mejor actriz en seis ocasiones.
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La actriz británica Deborah Kerr, protagonista de clásicos del cine como "De aquí a la eternidad" o "El rey y yo" falleció este jueves a los 86 años de edad.
Nacida en Escocia en 1921, Kerr inició su carrera participando en numerosas películas británicas, antes de cruzar el Atlántico y convertirse en una de las mayores estrellas del Hollywood de los años 50.
Aunque Deborah Kerr estuvo nominada al Oscar a la mejor actriz en seis ocasiones, sólo recibiría este galardón en 1994 en reconocimiento a toda su carrera.
Kerr, que padecía Parkinson desde hacía varios años, vivía en Suiza, pero al empeorar su estado de salud decidió regresar a Inglaterra para estar junto a su familia.
La actriz estaba casada con el escritor y guionista Peter Viertel, con el que tuvo dos hijas.
Estrella de Hollywood
Con Lancaster protagonizó la escena más controvertida de su momento.
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Su primer papel importante en el cine le llegó en en el filme británico "Major Barbara".
Su momento de esplendor lo viviría en la década de los 50 y 60, cuando protagonizó cintas tan memorables como "Las minas del rey Salomón (1950), "Quo Vadis" (1951), "El prisionero de Zenda" (1952), "El rey y yo" (1956) o "La noche de la iguana" (1964).
Una de las películas por las que Deborah Kerr pasará a la historia del cine es "De aquí a la eternidad" (1953) que protagonizó junto a Burt Lancaster y en la que aparece la famosa escena en la que ambos, tumbados en la playa, se besan apasionadamente.
A partir de finales de los años 60 Deborah Kerr pasó a trabajar principalmente en el teatro y la televisión.
Cuando le otorgaron el Oscar honorífico lo hicieron en reconocimiento a una artista "de impecable gracia y belleza, una actriz dedicada que en su carrera cinematográfica ha ido siempre en búsqueda de la perfección, la disciplina y la elegancia".
"Debo confesar, que he pasado un tiempo maravilloso", dijo la actriz al recoger el premio.