Paredes anunció que la nueva dirigencia de su partido promoverá el diálogo con el gobierno.
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El decano Partido Revolucionario Institucional, que ocupó el poder durante más de siete décadas en México, eligió este domingo a su nueva dirigencia con miras a recuperar su fuerza política, perdida durante las elecciones presidenciales de 2006.
De acuerdo con la Comisión Nacional de Procesos internos del PRI, la fórmula integrada por Beatriz Paredes y Jesús Murillo Karam, presidenta y secretario general respectivamente, ganaron con 9.410 votos de un padrón de 17.705 consejeros considerados.
La jornada se caracterizó por la nutrida participación del electorado priísta que alcanzó el 77 %, con la que el PRI está renovando su dirigencia para el periodo 2007-2011.
Al asumirse como triunfadora, Paredes anunció que la nueva dirigencia de su partido, que encabezará a partir del 4 de marzo, promoverá el diálogo con el gobierno federal y el resto de los partidos políticos.
"Habrá una relación de diálogo con las fuerzas políticas, con el gobierno federal, con los gobiernos estatales y del Distrito Federal, y siempre con la certidumbre de que nuestra perspectiva de país animará nuestra posición", aseguró.
Reconstrucción interna
En su segunda elección democrática, desde que perdió la presidencia en 2000 ante el ex mandatario Vicente Fox del Partido Acción Nacional, el PRI comenzó su camino de reconstrucción interna que se vio afectada durante la jornada electoral del 2 de julio de 2006.
En aquellos comicios, el PRI perdió la presidencia y también su lugar como segunda fuerza en el congreso.
Según analistas, las ambiciones presidenciales de su ex líder Roberto Madrazo, quien quedó en tercer sitio, llevaron al partido a una severa crisis interna que derivó en una desbandada de ciertos sectores del priísmo.
Además de las fracturas internas, el PRI enfrenta problemas financieros y una crisis de identidad que Paredes prometió restablecer con los principios de izquierda y la cercanía del partido con la gente.
El PRI ocupa por primera vez la tercera fuerza en la Cámara de Diputados y segunda en el Senado, pero aún cuenta con 17 gobernaciones de un total de 32 entidades del país.