Baltasar Garzón, juez de la Audiencia Nacional de España, se declaró este jueves competente para investigar cuál fue el destino de decenas de miles de personas que desaparecieron durante la Guerra Civil y el posterior gobierno de Francisco Franco.
En consecuencia, ordenó abrir varias fosas comunes, entre ellas una en la que se cree están los restos del poeta Federico García Lorca, quien fue asesinado por las fuerzas fascistas al principio de la guerra, en los años '30.
En el auto de 68 páginas, el juez Garzón dice que los franquistas llevaron a cabo "detenciones ilegales permanentes" que caen dentro del contexto de crímenes contra la humanidad.
Se refiere a 114.000 personas que desaparecieron durante un período de 15 años tras el estallido de la guerra en 1936.
Controvertido
El corresponsal de la BBC Steve Kingstone escribió desde Madrid que nunca antes la Guerra Civil había sido investigada por un juez y anticipó que la frase "crimen contra la humanidad" generará polémica.
El conflicto comenzó el 18 de julio con el levantamiento militar del general Francisco Franco en Marruecos y se extendió hasta el 1 de abril de 1939. Se calcula que medio millón de personas murieron durante la guerra civil.
Pero el auto emitido por Garzón no se circunscribe sólo a esos casi tres años de lucha fratricida sino también al gobierno del "generalísimo", en el que según el juez los vencidos "fueron perseguidos, encarcelados, desaparecidos y torturados".
El documento legal nombra a Franco y a 34 de sus más cercanos asesores como los instigadores de los presuntos crímenes.
Solicita incluso que sus certificados de defunción sean presentados para probar que ya no pueden ser procesados.
El juez también le pidió al Ministerio del Interior español que provea los nombres de los dirigentes del fascista Partido Falange, que apoyó a Franco, para establecer si son responsables de algún hecho reprobable.
El juez Garzón es conocido por llevar casos de crímenes contra la humanidad de personajes como el ex presidente de Chile, Augusto Pinochet.
El año pasado, las familias de personas que desaparecieron durante la Guerra Civil Española o durante el gobierno de Franco le pidieron que les ayudara a encontrar los restos y a clarificar las circunstancias de la muerte de sus seres queridos.