No está claro aún si el misil ha perforado el tanque del USA 193.
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Un misil lanzado desde un buque de guerra de la armada de Estados Unidos impactó a un satélite defectuoso usado para espionaje, dijeron fuentes militares.
El operativo militar tenía sólo un lapso de 10 segundos para impactar el satélite USA 193, que pasaba a 210 kilómetros de altitud sobre el Océano Pacífico.
La operación se realizó desde el oeste de Hawai, horas después de que la aeronave Atlantis aterrizara, y a pesar de las advertencias de que el mal tiempo podría retardarla.
Misión exitosa, pero polémica
El corresponsal de la BBC, Jonathan Beale, dice que el operativo era tremendamente ambicioso, como querer insertar un misil en el ojo de una aguja.
La acción, ordenada por el presidente George W. Bush la semana pasada, tenía por objetivo evitar que el tanque de combustible del satélite libere gases tóxicos en su retorno a la Tierra.
Para ello, era necesario impactar el USA 193 justo en el límite con la atmósfera terrestre, con el fin de minimizar la cantidad de restos que permanecerán en el espacio.
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El operativo militar tenía sólo un lapso de 10 segundos para impactar el satélite USA 193, que pasaba a 210 kilómetros de altitud sobre el Océano Pacífico
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El misil necesitaba perforar el tanque de combustible del satélite, que contiene más de 450 kilogramos de hydrazine -una sustancia química con efectos tóxicos sobre los humanos- para evitar que esté entero durante el reingreso.
Si el tanque está entero en el momento del aterrizaje, podría liberar gases tóxicos sobre un área amplia de la Tierra.
En cambio, si se destruye el sistema de control termal, el combustible se convertiría en un sólido congelado, permitiendo que el tanque resista el calor en el momento de ingresar a la atmósfera.
No está claro aún si el misil ha perforado el tanque.
Preocupación
El USA 193 perdió control pocas horas después de su lanzamiento.
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Funcionarios prevén que más del 50% de los restos del satélite caerán a Tierra en las primeras 15 horas después del impacto, o en las primeras dos revoluciones del planeta.
Rusia y China expresaron su preocupación acerca del plan.
Moscú dijo que podría tratarse de una prueba encubierta de nuevas armas espaciales.
Estados Unidos negó que la operación fuera una respuesta a la prueba anti-satélite llevada a cabo por China un año atrás.
Según el corresponsal de la BBC en Pekín, Michael Bristow, un portavoz de la cancillería China dijo que su país seguía con cuidado la situación. También pidió a EE.UU. que le entregue a la comunidad internacional información sobre este operativo.
En enero de 2007, China destruyó un satélite en el espacio, lo que desató temores de una carrera armamentista espacial.
"Ultrasecreto"
El corresponsal de la BBC en Washington, Vincent Dowd, afirma que se cree que el satélite lleva un sensor de imágenes ultrasecreto.
El Departamento de Defensa estadounidense no quiere que ese equipo caiga en manos equivocadas, sostiene Dowd.
El satélite espía USA 193 fue lanzado en diciembre de 2006.
Poco después, una falla en su computadora hizo que se perdiera el control del artefacto.
Se cree que tiene el tamaño de un autobús pequeño y que pesa cerca de 2.300 kilogramos.
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ASÍ SE DERRIBÓ
1 El misil SM-3 es lanzado desde un barco de la marina estadounidense en el Océano Pacífico
2 El misil, compuesto por tres partes, se dirige hacia el punto de colisión, donde la velocidad de acercamiento rondará los 10km por hora
3 El satélite alcanza la altura deseada de 240km, casi entrando a la atmósfera
4 El misil entra en contacto y rompe el tanque de combustible, liberando hidrazina en el espacio
5 Los escombros se dispersan por el espacio, desplazándose cientos de kilómetros
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Misil contra satélite
