Senado de EE.UU. duro con Casey

Casey sintió la ira de los senadores.

El general George Casey, quien comandó las fuerzas estadounidenses en Irak por los últimos dos años, y está nominado para ser el próximo jefe de Estado Mayor del Ejército, negó que la actual política de EE.UU. en Irak haya fracasado.

Casey debió afrontar duros cuestionamientos el jueves en el senado estadounidense, durante la audiencia de confirmación en su nuevo cargo.

Además, refutó al senador republicano John McCain, quien dejó entrever que él había dibujado un panorama "rosa" de los eventos.

"No coincido en que tenemos una política fallida", dijo al Comité de las Fuerzas Armadas del senado.

El presidente estadounidense, George W. Bush, planea enviar 21.000 soldados más a Irak para ayudar a solucionar el conflicto.

Pero el general Casey indicó que la seguridad en la capital, Bagdad, podía mejorarse sin necesidad de inyectar más tropas.

Confirmación "dudosa"

"Creo que el trabajo en Bagdad, tal como está diseñado ahora, puede ser llevado a cabo con menos que eso", señaló a los senadores.

"Pero, el tener las otras tres brigadas en un ciclo de despliegues, le dá al general Petraeus (su sucesor) una gran flexibilidad", dijo.

El corresponsal de la BBC en Washington, James Coomarasamy, dice que la atmósfera en la audiencia fue hostil.

Miles de soldados serán enviados a Irak.

Casey sintió la ira de los senadores, que sienten que tanto ellos como el país fueron decepcionados por sus líderes militares, agrega el corresponsal.

Los senadores recordaban a Casey, una y otra vez, sus comentarios hechos ante el comité durante los dos años y medio en que estuvo a cargo de las operaciones en Irak.

Según el corresponsal, hay posibilidades reales de que el general no sea confirmado como el próximo jefe del Estado Mayor del Ejército por el congreso, debido a los fracasos en Irak.