EE.UU. dice que Irán provee bombas letales a los insurgentes en Irak.
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Un alto funcionario de Estados Unidos advirtió a Irán que detenga su ayuda a los insurgentes iraquíes en la fabricación de bombas letales que son utilizadas para atacar a tropas estadounidenses.
En una entrevista con la BBC, el subsecretario de Estado, Nicholas Burns, dijo que las fuerzas estadounidenses detuvieron a varios iraníes sospechosos de proveer armas a grupos militantes chiitas.
El funcionario agregó que la ayuda iraní a insurgentes se está expandiendo desde la ciudad de Basra, en el sur del país, hacia Bagdad, la capital, y ha causado varias bajas en las tropas estadounidenses y británicas en las últimas semanas.
Ésta es la última en una serie de acusaciones de EE.UU. a Irán para que detenga su supuesto apoyo a los insurgentes chiitas en Irak, acusaciones que Irán niega.
Más acusaciones
Burns declaró a la BBC que algunos de los cinco iraníes detenidos el 11 de enero por tropas de EE.UU. en el norte de Irak eran miembros de la fuerza al-Quds de la Guardia Revolucionaria Iraní, y no diplomáticos iraníes, como el gobierno de Teherán sostiene.
Burns dijo que EE.UU. ha estado siguiendo de cerca los movimientos de Irán en Irak por dos años, y que ha encontrado pruebas de que Irán está asistiendo a los grupos militantes chiitas.
El gobierno del presidente George W. Bush ha endurecido el tono de sus acusaciones hacia Irán últimamente.
En su reciente discurso del estado de la Unión, Bush acusó a Irán de armar a "terroristas como (la organización político-militar libanesa) Hezbolá", y agregó que "el mundo no permitirá que el régimen de Teherán adquiera armas nucleares".
Por otro lado, EE.UU. está enviando más tropas a Bagdad para tratar de frenar la creciente violencia sectaria, a la vez que está apuntalando su presencia militar en el Golfo Pérsico.
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