Fox se reunirá con el presidente de EE.UU., George W. Bush, en Cancún.
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El presidente mexicano, Vicente Fox, expresó su apoyo al anteproyecto de ley de inmigración que fue aprobado por el Comité Judicial del Senado de Estados Unidos, el lunes.
El mandatario aseguró que el proyecto de ley es un paso positivo hacia delante.
"Me siento contento de que estemos progresando, soy optimista, este es el resultado de cinco años de trabajo", aseguró Fox a los reporteros.
"Va hacia delante, aún queda mucho (por hacer), un largo camino por recorrer, pero cada paso es importante y valioso", agregó.
"Cada uno de nosotros añadirá su grano de arena. Con certeza seguiré trabajando; lo haré (esta semana) con el presidente (George W.) Bush en Cancún (México), donde nos vamos a reunir y donde, precisamente, vamos a tocar el asunto de inmigración entre otras cosas", añadió Fox.
Futuro
La ley, que aún tiene que ser debatida y votada en el pleno del Senado, permitiría a los inmigrantes ilegales quedarse y trabajar en territorio estadounidense, luego de pagar una multa.
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Las recientes protestas en diferentes lugares en Estados Unidos, son un indicativo de la inminente necesidad de un acuerdo migratorio que atienda los intereses de ambos países.
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La propuesta es menos severa que una ley aprobada en diciembre por la Cámara de Representantes que consideraría la inmigración ilegal como un delito, e impondría fuertes multas a los empleadores que contrataran trabajadores ilegales.
"Las recientes protestas en diferentes lugares en Estados Unidos, son un indicativo de la inminente necesidad de un acuerdo migratorio que atienda los intereses de ambos países y en general, (que) proteja los intereses de los inmigrantes", aseguró Rubén Aguilar, portavoz del presidente mexicano, Vicente Fox, de acuerdo a la agencia AFP.
La mayoría de los cerca de 12 millones de indocumentados que se calcula viven en EE.UU. son de origen hispano, sobre todo mexicano.
Bush viajará esta semana a México para abordar el tema migratorio y otros asuntos con su homólogo mexicano, Vicente Fox y el primer ministro canadiense, Stephen Harper.