Gray Davis podría dejar de ser gobernador antes de lo que creía.
|
Una corte de apelación de Estados Unidos hizo cambiar nuevamente la fecha del referéndum y posible elección para decidir el futuro gobernador de California.
El tribunal decidió unánimemente que el comicio debería seguir como se había previsto en el 7 de octubre.
Los candidatos que esperan reemplazar al actual gobernador, Gray Davis, como el actor de Hollywood Arnold Schwarzenegger, continuaron la campaña mientras la batalla legal todavía sigue abierta.
La semana pasada un pequeño panel de jueces decidió que el uso de las antiguas boletas electorales que provocaron polémica en Florida en las últimas elecciones presidenciales pondrían en riesgo el resultado de los comicios.
Sin embargo, la decisión fue revocada por los 11 jueces de la Novena Corte de Apelación de Circuito de Estados Unidos el martes.
En Los Angeles, David Willis, de la BBC, asegura que esta última sentencia podría todavía ser desafiada por la Corte Suprema de Estados Unidos, pero esa institución difícilmente cambiaría el sentido de la decisión.
Un estado poderoso
La campaña electoral comenzó luego de que los críticos del gobernador Davis -el ganador demócrata de las últimas elecciones cuya gestión económica ha sido cuestionada- consiguió las suficientes firmas de los electores para convocar el referéndum para echarlo del poder.
Los republicanos están interesados en conseguir el poder en el estado considerado influyente y económicamente poderoso como preludio a las elecciones presidenciales del año que viene.
Los votantes tendrán la oportunidad de decidir si Davis debería seguir o no, y luego seleccionar a un sustituto si se decide su relevo.
El secretario del Estado de California, Kevin Shelley, dijo que el retraso del voto llevaría a una "crisis constitucional".
La constitución de California requiere que se convoque la elección al cabo de no más de 80 días después de que se hayan recogido suficientes firmas de los votantes registrados, dijo Shelley.
El secretario californiano dijo también que decenas de millones de dólares se han gastado ya en el envío de dos millones boletas y otros materiales relacionados con las elecciones.
Los condados de Los Angeles y Sacramento -que todavía utilizan las boletas en las que se agujerea la casilla del candidato al que quieren elegir- habían dicho que tienen las garantías de que la elección será justa y se puede convocar.