El primer ministro de Japón decidió vestirse informalmente este verano y quiere que millones de trabajadores japoneses hagan lo mismo.
El gobierno busca cambiar los hábitos de 128 millones de japoneses.
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El primer ministro de Japón, Junichiro Koizumi, le pidió a los trabajadores que se quiten sus corbatas y camisas de cuello como parte de un esfuerzo nacional para gastar menos energía en aire acondicionado.
Para demostrar lo serio de sus afirmaciones, Koizumi ordenó a sus ministros que se deshicieran de sus trajes para servir de ejemplo a la población.
Japón, con un clima de verano caliente y húmedo, obliga a las oficinas y bares a utilizar sistemas de aire acondicionado.
"Los funcionarios gubernamentales no dejarán de llevar corbata a menos que sus jefes lo hagan primero", dijo Koizumi.
"En principio quiero que los ministros no lleven corbatas ni trajes este verano para ahorrar energía."
Veranos tropicales
Koizumi recibió el apoyo de su ministra de ambiente, Yuriko Koike.
La ministra prometió organizar un desfile de modas en caso de que los ministros tuvieran dudas sobre cómo vestirse, reportaron los medios de comunicación japoneses.
En los dos últimos años las condiciones climáticas durante el verano en las principales ciudades japonesas, como Tokio y Osaka, se han caracterizado por tener una temperatura promedio de más de 30 grados centígrados.
La pérdida de productividad en un clima caliente y húmedo ha sido atribuida al uso de camisas de cuello y a los trajes de lana y poliester.
Los sistemas de aire acondicionado regularmente son encendidos al máximo durante todo el día para tratar de mantener a la gente fresca.
Sin embargo, puede que Koizumi no sea del todo optimista sobre su propuesta de cambiarle los hábitos de vestimenta laboral a 128 millones de japoneses.
El primer ministro probó su idea con los empleados de su residencia oficial el pasado verano y fueron pocos los que finalmente se vistieron en mangas de camisa.